Poesía Gótica

AMANECER GÓTICO

Hoy será una noche tranquila

Las nubes son más que grises

Y se avecinan plegarias tristes

De una vida que abandonara este mundo.

Una fría ráfaga estremece la piel

Y el tiempo se detiene por un instante,

Una sombra que cubre esas cuatro paredes

Mientras la muerte cava una tumba.
Las velas se extinguen lentamente

Con el viento de la lejanía

Las ofrendas florales sangran

Con la terrible tristeza Que genera la muerte

Marchitándose al igual que la vida.

Demonio, eso es lo que soy.

Ángeles Caídos, lo somos todos.

La noche cayendo hasta los últimos rayos de luna

Acarician las tumbas que un dia mas

estarán plagadas de desolación

¡¡¡EL DESPERTAR DE UN DEMONIO SE ACERCA!!!

LAMENTO MORTAL

Victimas de la sombra que diluye el tiempo fundiendo lo real con lo fantástico, distingues a lo lejos una figura que surge de la memoria la cual de desvanece en el tiempo y nos encontramos vagando entre tormentos y pasiones, buscando desesperadamente su destino y esperando sus designios. Esa noche en lugar de la voz que solía escuchar en la oscuridad se levanto otra voz temible pero a la ves tierna.

¿No huye el corazón muchas veces de ti?
Lejos de la densa tiniebla que la ciudad inunda hacia donde estalla súbito su esplendor. El campo santo, el basto campo santo que nuestras tareas consolara, aquí las lágrimas se han convertido en fango y nunca será verdad que a menudo el corazón nos aleja de crímenes, dolores y culpas arrastrándote hacia la muerte.

Que lejos te hayas ya paraíso hipócrita
donde bajo los cielos todo es amor y risas
donde lo que se ama es digno de ser odiado
donde en puro deleite se ahoga el alma.
El lamento mortal aun se escribe y sus glorias son cantadas con afán. Estas almas no han dejado de brillar y en compañía de sus espíritus los esperamos sin cesar.

Tu que como un gran amor has entrado en mi corazón vacío.
Tu que como una manada de demonios enloquecida y furiosa viniste a mi espíritu humillado a postrar tu lecho y tu dominio.

Muerto en vida soñando con mi gran tumba de mármol, noche tras noche, gota a gota sus lagrimas zacearan mi furia y desesperación a cambio tomo mi alma que diluye en gritos el dolor que expresan los extremos humanos, guerra y poesía, minutos y siglos, razón y locura, felicidad y venganza.

Así a través de mi ultimo camino en medio de tétricos paisajes y cubierto por la noche avance hasta mi nuevo hogar santificado por la luna y la oscuridad.
Desde esta morada grotesca y húmeda entre el reino de la muerte bajo tierra, con desprecio observo a los que sueñan con una vida eterna a los que buscan un maldito origen. No existe nada sin un fin y no me guía el deseo sino el odio por esa vida y la ausencia de ella "los temores de la humanidad serán eternos"

Se dice que no se puede regresar el tiempo mas que sirviéndose de él, así que este será el tiempo en que mi destino se servirá de los tormentos de la humanidad cuando los acose mi sombra, enfrentando un miedo fatal, se desvanecerá el amanecer cuando la muerte haya comenzado.

TODA LA HUMANIDAD ESTA MUERTA SOLO QUE AUN NO SABE QUE EL AMOR PUEDE SER LA MUERTE Y LA MUERTE PUEDE SER NUESTRO UNICO AMOR.

ROSA NEGRA

Vida de un ser olvidado
en una soledad devastadora
un alma que solo añora
la compañía de un ser amado,
en una gran tumba encerrado
solo pudiendo observar la oscuridad
en compañía de las lagrimas de la luna
cruza su sendero de la inmortalidad
rechazado por la propia vida
de quienes lo pueden observar
condenado a nunca ver el día
por el alma de una pobre humanidad.

Las calles muestran solo desolación acompañado solo por el eco de sus pasos, observa una figura salir de su imaginación es la poesía que escapa de sus propios brazos
bajo un vestido blanco apareció, frente a sus ojos estaba postrada, observo el rostro de una hermosa hada, que sus sueños en música condeno.

Desterrado de ese corazón
por ser un ser supremo
el gélido viento congela su amor
que el llanto no puede seguir destruyendo.
Regresa muriendo a su tétrico hogar
cubierto con lluvia todo su ser
al entrar en ella su alma no puede creer
que el amor humano entre sus brazos puede tener.

En sus tersos pétalos no puede confiar
y explota su furia en una tempestad
las finas navajas cortan su piel
la sangre brota y la cubre de hiel
la oscuridad toma forma del amor
ahora la maldad ya no esta en su interior
Un regalo que la luna le brinda a su amada
mientras la muerte asecha con su mirada
dos almas que se unirán en la penumbra
melodías, sueños y poesía unidos en una sola tumba.

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